lunes, 8 de diciembre de 2008

Tempus fugit

Cada vez que veo fotografías y trabajo con ellas, me doy cuenta de que son uno de los pocos remedios que nos quedan para combatir la condición etérea del tiempo. Ayer mismo vi a unos orgullosos padres intentando arriesgadamente mantener derechos a sus pequeños en un pequeño parterre de la Diagonal entre veloces filas de coches y humos. Así está de caro lo verde en Barcelona. Tambien los turistas retrataban con sofisticados móviles el ambiente navideño del Portal del Angel (seguidos de cerca por curiosos "turistas" rumanos) intentando exprimir al máximo su fin de semana gaudiniano. Más tarde una chica inmortalizaba a su pareja con pose de modelo romano frente a una columnoa dórica. Un buen ejemplo de como la vanidad nos transforma en un segundo cuando un objetivo nos enfoca.
Las fotos, popularizadas por la portabiliadad de los móviles y la gratuidad de lo digital, nos permiten capturar momentos únicos, detalles sin aparente valor pero con pleno significado cuando sabemos de su emisor o del momento en que dicho instante fue robado al tiempo. Fotos enviadas, fotos publicadas, fotos editadas con música que le aportan solemnidad o dulce nostagia. Las fotos de cuando éramos jóvenes, las de aquel viaje, las del momento memorable de aquellas vacaciones, las del partido irrepetible al que asistimos....
Empiezan las fiestas y con ellas se nos ofrecerán incontables ocasiones para inmortalizar, momentos de risas, de música, de magia, de niños, de luces...
Capturemos esos momentos para siempre pero en la pericia del encuadre, no nos olvidemos de vivir cada instante intensamente y cada ocasión como merece lo irrepetible.
Y si el señor Alzheimer viene en un futuro a fastidiarnos la memoria RAM de nuestro cerebro, siempre nos quedará evocar con estas fotos los mejores instantes de nuestra vida digital almacenados en el disco duro de nuestro corazón.

Joan Clotet

sábado, 8 de noviembre de 2008

Volar alto



Últimamente paso mucho tiempo viajando en aviones. Esto tiene la ventaja de tener tiempo para hacer volar la imaginación pero también para pensar a veces qué pasaría si el avión bajase más rápido de lo previsto y deseado.
En uno de estos momentos místicos (post inquietantes turbulencias) me he dedicado a escribir una especie de decálogo para mis hijos para que ellos puedan encontrarlos siempre aquí en mi blog.
Lejos de pesimismos y dramas (espero vivir muchos años y coger muchos aviones) sólo quiero dejar este mini legado digital compartiendo unas reflexiones íntimas viajando por Europa. Si a los que lo leeis también os inspira en algo, pues seré doblemente feliz.

Consejos de padre

- Con el dinero, comprad tiempo y tranquilidad
- Unos segundos de esfuerzo a tiempo os ahorrarán mucha incomodidad
- No podeis decidir cuanto tiempo podeis vivir pero sí cómo quereis vivirlo
- No tengais vergüenza pero no hagais nada que os pueda avergonzar
- Respetad el medio ambiente como vuestra casa
- Invertid en vosotros y los vuestros
- Escuchad para entender a todo el mundo con respeto. De todos se aprende
- Tratad a los demás como quereis que os traten a vosotros
- Respetad vuestro cuerpo y honrad vuestros valores
- Disfrutad al máximo y agradeced vuestra suerte y todos los buenos momentos
- No malgasteis mucho tiempo en lamentaciones
- Preparaos a conciencia para las grandes ocasiones y decidid cuáles lo serán
- Reconoced y combatid vuestros defectos
- No tengais complejos. El único defecto importante es creerse defectuoso
- Todo tiene remedio (excepto la muerte, así que vivid con intensidad)
- Escuchad a vuestra cabeza pero escoged con el corazón
- No tengais miedo de decir las palabras importantes en los momentos oportunos
- Cuidad a la familia y los amigos, ellos son vuestro refugio
- No renuncieis nunca a la felicidad por nada ni nadie
- No querrais vivir la vida de nadie. Inspiraos en todos pero sed protagonistas
- No os rindais nunca.

La vida es una película en la que sereis guionista, productor, director y protagonista. Haced todo lo que esté a vuestro alcance, sin hacer daño a nadie, para que sea una obra memorable.

Sed felices

domingo, 26 de octubre de 2008

Proyectos y realidades

Conoceis la diferencia entre proyecto y realidad? Confianza, riesgo, decisiones y acción. Hace 2 meses viví un cambio laboral que dejó a una persona muy cercana, capaz, experimentada y determinada sin trabajo y con la cabeza llena de dudas y temores.
El susto requería su proceso de asimilación pero sólo lo justo y necesario para reorientar los esfuerzos hacia el futuro. El buen trabajo de los últimos años, la experiencia y contactos acumulados, la ayuda inestimable de socios complementarios y especialmente, la energía positiva que sólo puede atraer el mismo, se concretaron en un proyecto de empresa que ha puesto la primera piedra el último fin de semana por la puerta grande.
En un entorno de incertidumbre como el que nos movemos, donde de un día para otro la sólida empresa en la que depositamos nuestra confianza de estabilidad y garantías para el futuro inmediato, nos dice que no sabría que hacer sin nosotros pero han decidido intentarlo, el talento y el trabajo individual vuelven a tomar fuerza para reivindicar a la persona sobre la empresa. Vale más la pena que nos aplicamos en lo que hacemos, no importa si somos abogados, bomberos, carniceros o payasos. En un entorno de incertidumbre económica y falta de confianza en las instituciones, sólo el trabajo bien hecho a nivel individual y la capacidad de emprender con sensatez y suma de talentos nos puede hacer más fuertes y menos vulnerables a los altibajos económicos que seguro seguiremos sufriendo los próximos meses.

Joan Clotet

miércoles, 24 de septiembre de 2008

Cuando querer es poder

El pasado fin de semana acudí a mi cita anual con la montaña, la Matagalls-Montserrat, una travesía nocturna en la que el reto es recorrer la distancia entre dos puntos (84 km.) en menos de 24 horas. El ambiente de una prueba como esta, lejos de ser un encuentro elitista para osados deportistas de aventura es una variada convención de seres humanos con un reto comun, piernas de hierro y mentes determinadas.
En los equipados cuerpos descubrimos auténticos superhombres y mujeres, fajados en mil batallas deportivas, cuyo objetivo no es ya llegar sino superar su marca del año anterior, objetivo para el que se han preparado a conciencia durante meses. Estos héroes de la montaña, son una muestra de eficiencia en sus movimientos, su equipamiento, su mentalidad... De todos modos, entre tantos deportistas que afrontan su cita anual , me quedo con otro tipo de participante. Me fijo en el hombre de más de sesenta de mirada confiada y atuendo dominguero, que llegará a la cima mucho antes que la mayoría. Me quedo con el orgulloso padre con su hijo de 12 años, ya preparado para gestas como esta. Me quedo con las sufridas miradas que ignoran la fatiga de sus piernas para empujarlas hasta la cima. Me quedo con los aplausos de la pareja que recibe a su emocionado/a amado/a en sus últimos escalones hacia el templo. Me quedo con la labor, los ánimos y el calor de los que organizan y colaboran en la travesía, repartiendo caldo y sonrisas durante todo el trayecto. Me quedo con la fuerza mental de todos los que, agotados en el km. 40, empuñan sus palos para que les ayuden a superar 40 más.
En definitiva, admiro a todos aquellos que se marcan un objetivo ambicioso, se preparan a conciencia y se superan día a día. Pero lo que realmente me sorprende es la capacidad de nuestra mente de llevarnos más allá de nuestros límites conocidos, siempre que nuestra motivación y compromiso nos aporten la energía necesaria para ignorar nuestros miedos.
Quizá no es necesario machacarnos tanto para demostrarnos que podemos, pero si quereis sorprenderos y admirar la inagotable capacidad de las personas para superar sus limitaciones, os emplazo a que paseis el tercer domingo de septiembre por la montaña de Montserrat para recibir con un aplauso a gran cantidad de héroes anónimos. Sus logros ridiculizan nuestros miedos diarios a afrontar retos para los que todos, aunque no lo queramos saber, estamos potenciamente preparados.
Amigos, como decía a menudo mi padre: "Qui vol, pot" (Quien quiere, puede).

Joan Clotet

domingo, 14 de septiembre de 2008

Carpeta nueva

Mañana empieza el curso y con él, la ciudad su ritmo habitual y los ciudadanos se plantean nuevos retos, hacen buenos propósitos, comienzan dietas, compran fascículos y tantas y tantas cosas ...
Mañana todos los niños (y no tan niños) estrenarán plumier y quizá ropa y seguro libros (de los que esperamos que el valor esté a la altura de su precio ).
Es un buen momento para hacer limpieza mental y romper con los malos hábitos para asumir otros nuevos. Dado que las estadísticas están abrumadoramente en contra nuestro (más del 75% de los nuevos propósitos se deshincharán como globos en pocas semanas) sería bueno marcarse un plan semanal humilde, con tareas asumibles y sostenibles.
Tanto en el plano profesional como en lo personal, una semana productiva nos llena de satisfacción y descarga nuestra conciencia en favor de más energía para crecer.
Si miramos atrás unas pocas semanas y vemos la facilidad con la que el ser humano se pone en "modo relax" y es dueño de su propio tiempo hasta desperdiciarla sin cargo de conciencia, se hace difícil pensar que entraremos en esta dinámica productiva y positiva en poco tiempo. Las vacaciones son tiempo de familia, relax, ocio deportivo, cultural, social, gastronómico y en general de excesos más viscerales que crebrales. Son el reino de todas aquellas cosas que no podemos hacer la mayor parte del año mientras trabajamos para financiar nuestros sueños. Esta sobredosis de placer hace más dura la reentrada (proporcionalmente al tiempo en que hemos estado desconectados de la máquina productiva).
A los que tenemos el lujo de trabajar en cosas que nos gustan no se nos hace dificil encontrar motivaciones, pero mucha gente necesita una buena dosis de paciencia (o de mala leche) para asumir su dura realidad.
Ahora mismo por televisión entrevistan a los adolescentes que decoran sus carpetas con fotos de sus ídolos musicales, deportivos, etc. como mantra de apoyo mutuo antes de empezar el nuevo curso. La fantasía también es el motor de la realidad.
Ilustrar nuestra "carpeta mental" con fotos de nuestros sueños y nuestras responsabilidades, estrenaremos corbata y nos desayunaremos el lunes con el mismo empuje que esperamos de los demás.
Así como los niños se forran los libros cada septiembre, los adultos soñamos en "forrarnos" nosotros para no tener que volver que pasar por este trance nunca más.

Buenas noches y buena suerte
Joan Clotet

martes, 8 de julio de 2008

A mi viejo profesor

Esta semana pasada resolví una asignatura pendiente desde hace meses: abordar a mi viejo profesor de inglés y agradecerle su trabajo. Hacía mucho tiempo que le veía por el barrio, caminando lentamente camino del supermercado, con la mirada propia de quien está de vuelta ya de todo. Intercambiamos unas palabras, me identifiqué y le agradecí su capacidad didáctica y de motivación con aquellos más de 40 niños que descubrían un nuevo idioma con el que primero podrían entender las letras de sus canciones favoritas y más tarde podrían comunicarse sin complejos por el mundo físico y virtual.
Cuando somos niños no sabemos apreciar el privilegio que supone que alguien te dedique su tiempo a enseñarte algun conocimiento o habilidad. Poco más tarde, ya descubrimos que eso cuesta dinero, que en la vida tendremos que aprender constantemente si queremos evolucionar y que el profesor que educa, motiva e inspira es una especie en extinción. Sólo cuando tenemos hijos apreciamos de nuevo el valor de esta etapa de la vida en que nuestro trabajo básico es absorber conocimiento y habilidades para sobrevivir en un mundo tan competitivo.
Volviendo a mi viejo profesor, y ante la confesión de su edad (99 años !!!) tras sonrisa picarona, me sorprendió calcular que él ya se jubilaba cuando yo tenía 10 años ! Es decir, cuando yo empezaba a despertar, él parecía retirarse a descansar.
A todos aquellos que comparten generosamente su conocimiento, más allá de su obligación profesional, mi agradecimiento y admiración. A todos aquellos que con 99 años aún recuerdan a sus alumnos de hace 30 y son capaces de mirar atrás con una plácida sonrisa y hacia delante con serenidad, mi más sana envidia.


Dedicado al profesor Solé y a todos los que comparten con vocación su conocimiento

Joan Clotet

jueves, 26 de junio de 2008

Podemos !

Si...quizá lo veamos simplemente como el slogan de una potente campaña de comunicación que magnifica las expectativas y resultados de un equipo de fútbol. No siempre (casi nunca) las cosas salen tan redondas como hasta ahora en un campeonato de alto nivel. En el fondo, se conjugan una serie de factores que son la base del éxito: calidad, convicción, comunicación y complicidad. Es decir, ser bueno, creérselo, darlo a conocer y retroalimentarse de la energía del conjunto. Tambien al otro lado del Atlántico, el sr. Obama ("Yes, we can") parte de un planteamiento similar y de momento le ha servido para batir a una dura y experimentada rival. Por tanto, tenemos una lección que aprender que está en el origen de todo logro, la convicción de dar lo mejor de uno mismo. La autoconfianza llevó a los Turcos a las semifinales, a los italianos a ganar más de un mundial y a los españoles, por una vez,tan lejos como su calidad hacía suponer (a pesar de los más prudentes que entonaban el más conservador "se va pudiendo" o los más agoreros al grito de "Volveeemos !"
Trasladando este cúmulo de energías al mundo profesional y personal, y aunque no siempre (no nunca) dispongamos de potentes medios de comunicación como altavoz y tanta ilusión colectiva en nuestro favor, todo parte de la convicción en nuestras posibilidades como base de una sólida preparación. El trabajo y la confianza nos hace superar a rivales y retos superiores a nosotros en calidad (que no en ambición). Somos siempre nuestro principal enemigo y tambien nuestro principal valedor. Ser positivo e irradiar confianza, inspira en los demás energía similar en nuestro favornos. Si además, ellos también se benefician con ello, el círculo virtuoso estará iniciado y entraremos en el majestuoso (y escaso) estadio de nuestras vids en el que todo es posible.


Joan Clotet

viernes, 20 de junio de 2008

Fin de curso ?

Para todos aquellos que teneis hijos, o estais estudiando, o aún teneis fresco en la memoria lo que significa el mes de Junio, la frase "fin de curso" sabe a sprint final, a incertidumbre y trabajo de última hora, a exámenes, pruebas y selectividades, a balance, logros y fracasos.
Desde pequeños estamos acostumbrados a vivir en ciclos, sometidos al calendario de un curso, una temporada o un ejercicio fiscal y a recibir al final del mismo el premio o castigo a nuestros trabajo. Saber planificar adecuadamente el esfuerzo, asumir nuestras carencias y no pecar de exceso de confianza, emplearnos a fondo en lo que más nos disgusta o evitar las tentaciones en favor de un trabajo a tiempo o riguroso son retos de los que nunca nos vamos a poder liberar.
Pero finalmente, a pesar de las angustias, sobreesfuerzos, dudas, jefes y profesores, inalterablemente nos encontramos con nosotros mismos, con el resultado de nuestro trabajo de fondo, con el premio o el castigo a nuestros méritos y deméritos. Y así ocurre siempre. Reflexión, buenos propósitos, fugaces cambios de hábitos y finalmente, nosotros. A pesar de padres, profesores, exámenes y notas, jefes e informes, proyectos y balances, al final siempre estamos nosotros.
Con tantas personas preocupadas y ocupadas por nuestro rendimiento, nos olvidamos a veces de enfrentarnos a nuestra conciencia y tomar las riendas de nuestra asignatura, de nuestro proyecto, trabajo o de toda nuestra vida.
Deberíamos preguntarnos que esperamos de nosotros mismos y que somos capaces de hacer si estamos motivados y nos empleamos a fondo y con pasión. Quizá esta introspección honesta e individual nos haga encontrar nuestra motivaciones reales para conseguir lo que queremos. No te valores por tus notas o por los signos de aprecio o desprecio de tu jefe. Define qué quieres ser y trabaja para ello. Olvida a jefes y maestros y trata de no fallarte ni engañarte a ti mismo/a asumiendo tus limitaciones, explotando tus capacidades y encendiendo el motor de la motivación que te llevará directo hasta tus sueños. Si la meta es suficientemente atractiva, las barreras te parecerán estimulantes retos y sabrás seleccionar sabiamente a tus mentores. No esperes reconocimiento y buenas notas para valorarte. Esfuerzate y celebra los pequeños éxitos. Es a tí mismo a quien no debes fallar. Sólo así lo que está a tu alrededor volverá a encajar en positivo.
La vida no se limita a cursos, exámenes, notas o promociones. Mañana puede ser el primer día de un nuevo ciclo positivo y esto está principalmente en tu mano.

Joan Clotet

(Dedicado a un amigo desorientado)

domingo, 30 de marzo de 2008

Determinación

Si, creo que ese es el término que mejor lo define. En el fondo no es más que creérselo uno mismo y actuar en consecuencia. Cierto es que estar motivado para algo y tener la confianza para abordarlo requiere algo más que autosugestión, pero en los últimos días he visto un par de ejemplos que vienen al pelo para ilustrarlo.
El primero es la convicción de un niño cuando quiere algo. En este caso, el regalo de cumpleaños soñado desde hace meses. Es espectacular ver la cantidad de recursos intelectuales y emocionales que un niño (desde la misma cuna) puede llegar a desplegar para conseguir lo que quiere. Con la debida cautela, es un placer acompañarle en ese camino hacia el "éxito" ayudándole a esforzarse por ello, a marcarse objetivos, reconocer y agradecer los privilegios, ganar autoconfianza, etc.
Cualquiera que tenga hijos o niños pequeños cerca, creo que se sentirá identificado.
En otro orden más público me regocija el camino seguido por Rodolfo Chikilicuatre, inminente ganador del festival de Eurovisión 2008. No le quito mérito al equipo creativo de El Terrat, al inmenso poder de los medios de comunicación y a lo facilón que es el público cuando se aúnan música pegadiza, humor y algo de frikismo.
En cualquier caso, yo me quedo con la determinación de tener un modelo de éxito, perfilar un producto, testearlo, comunicarlo y lanzarlo al éxito poniéndolo en la cresta de la ola, cuidando inteligentemente el entorno. Todo es empezar y creer en las posibilidades. El discurso español en Eurovisión de hace 10 años era, España no ganará nada porque la canción no es "festivalera". El único mérito parecía la clarividencia de Uribarri. El de ahora (sea con Rosa, con Chikilicuatre o el producto que se tercie) parte de la convicción de que se puede llegar muy alto si no nos ponemos límites desde el inicio. Quizá el chiki chiki no gane el concurso, pero los objetivos mediáticos (incursión de la sexta en RTVE) y económicos ya deben de estar más que superados.
Postdata: el niño, sin más estrategia ni medios de comunicación que su pasión y determinación inasequible al desaliento, ya tiene su nueva guitarra eléctrica. Si aplica las mismas armas en otros aspectos, sus conciertos darán mucho que hablar...

;-)

Joan Clotet

domingo, 24 de febrero de 2008

Qué haces, Qué vales, Qué eres ???

Cuando somos pequeños exploramos contínuamente nuestras posibilidades en base a nuestro instinto y nuestras preferencias. Más adelante vamos aprendiendo que tenemos limitaciones,que hay cosas que no están bien vistas o que hay aficiones con las que nunca nos ganaremos la vida. Años más tarde, cuando debemos decidir una profesión que nos permita pagar una hipoteca, la mayoría nos vamos limitando a explorar nuestras capacidades en la línea más conservadora en que supuestamente somos pagados por lo que valemos o podemos generar...
Sólo cuando nos quedamos inesperadamente en el paro, nos jubilamos, tenemos un momento de lucidez o nos toca la lotería podemos permitirnos recuperar la libertad y hacernos de nuevo esas preguntas que de pequeños ni nos planteábamos...
Qué nos apasiona ? En qué realmente somos buenos ? Qué nos gustaría hacer antes de que sea demasiado tarde ?
En fin...unos pocos privilegiados tienen la valentía y el acierto de dedicar sus esfuerzos en aquello para lo que realmente están dotados y motivados. No seríamos mucho más productivos y felices si descubrieramos quien somos realmente desde bien jovencitos y dedicáramos todos nuestros esfuerzos a potenciar y desarrollar esas habilidades?
Muchos lo hacen y sufren para pagar sus hipotecas...pero me temo que son más felices que la mayoría y que cuando su camino en este mundo va llegando a su final...no ven muchas oportunidades perdidas y autotraiciones cuando miran hacia atrás.

Moraleja: piensa si estás en el camino correcto y si aún estás a tiempo de cambiarlo.
Si tus obligaciones y temores no te permiten un cambio radical, hazte un favor y no desperdicies ninguna oportunidad de ponerte un disfraz distinto al habitual y regálarte una oportunidad. Quizá no te hagas rico ni tu vida cambie por completo, pero hay pocas cosas más placenteras en esta vida que ser honesto con uno mismo.

Joan Clotet

viernes, 4 de enero de 2008

El movimiento se demuestra andando

El cambio de año siempre parece un momento oportuno para los buenos propósitos. Estos días, los medios y nuestra conciencia nos invitan a reflexionar y automotivarnos sobre nuestros deberes pendientes de autoentrega.
Empezar una nueva hoja en blanco, estrenar agenda, el primer día de algo, o el efecto péndulo de los excesos consumistas de diciembre, parecen momentos propicios para iniciar el camino recto y más enérgico hacia nuestros objetivos de corto y largo plazo.
Claro está que por otra parte, tambien los medios y nuestra conciencia nos recuerdan que más del 80% de estos propósitos de año nuevo pierden fuerza a las pocas semanas (si no a los pocos días) y creo que una de las claves está en la motivación.
Ya hemos hablado otras veces de ello en este blog pero con un año recién estrenado creo que es oportuno dedicarnos una hora a repasar nuestros objetivos, tanto personales como profesionales y concretar una serie de acciones que nos encaminen hacia ellos. Uno de los motores de la motivación es el reconocimiento y una de la causas de que nuestra lista de "pendientes" se alargue es que nadie nos aplaude ni nos persigue por ella más que nosotros mismos, por tanto quizá sea bueno comenzar con algunos pequeños logros.
Concretar el plan de este mes, no más allá, y combinar temas triviales y primeros pasos de temás más fundamentales será un buen comienzo. Escribamos una lista priorizada de pequeñas tareas, cuyo esfuerzo sea asumible y cuyo resultado nos motive para retos mayores.
El simple hecho de hacer inventario descarga nuestra conciencia sobre un papel y nos obliga a dedicar un tiempo a cada tema (como mínimo, el necesario para plasmarlo en el papel y que nos mire amenazante y retador cada mañana)
Otra ayuda importante puede ser encontrar compañeros/as de viaje. Dado que ahora estamos todos más predispuestos, compartir y exponer nuestros planes con la familia, un amigo o un colega profesional nos comprometerá más y contribuirá a lo más importante, evolucionar desde la buena voluntad, pasando por las intenciones, llegando a los compromisos y derivando en lo más importante y único que realmente importa : la acción.
Antes de que seais devorados por el mar de la apatía y la frustración de vuestros eternos deberes pendientes, y dado que parece que enero sopla buen viento, aprovechad la ola para subir a la tabla (que os van a traer los reyes), mirad al horizonte y surfead con un colega hasta la próxima isla. Dicen que desde allí, la vista es espectacular...

"El movimiento se demuestra andando" (Vida de los filósofos ilustres - Diógenes Laercio, primera mitad del siglo III).

Joan Clotet